En España hay decenas de pueblos con encanto escondidos, bosques remotos y playas desiertas en las que disfrutar de unos días de tranquilidad, alejados del frenesí urbano y el turismo de masas. Son lugares que suelen pasar bajo el radar de los viajeros y que ofrecen pequeños oasis de relax y una muy escasa probabilidad de cruzarse con nadie conocido.
Viajar debería ser algo más que tachar elementos de una lista de deseos. Por eso te proponemos algunos de los mejores sitios para escapar de las multitudes y tumultos para recuperar tu espíritu aventurero o dedicarte en cuerpo y alma al dolce far niente.