Disfruta de unas vacaciones en la Costa Daurada

La Costa Daurada es una bonita región de arena suave y aguas atractivas que se distribuyen en nada menos que 60 playas diferentes. Las vacaciones de verano en este pequeño paraíso te permiten desconectar de todo entre paisajes mediterráneos salpicados del intenso verde de los jardines y bosques de los alrededores. Algunas de las mansiones históricas que adornan la zona cuentan con amplias colecciones botánicas que se pueden visitar.

Por su parte, su abanico de actividades náuticas es muy amplio gracias a las aguas cálidas y tranquilas del Mediterráneo. Las más populares son el piragüismo, la pesca y el buceo, aunque el mar es lo suficientemente sereno como para disfrutar de días divertidos en la playa con la familia.

La región en general presenta espectaculares ejemplos de arquitectura mediterránea en edificios y ruinas de gran belleza que abarcan siglos de historia. Por lo que respecta a la ciudad de Tarragona, los elementos arquitectónicos varían según el distrito debido a las diferentes influencias en la historia de la comarca, así que se trata de un lugar fantástico para echar un vistazo a numerosas tradiciones del Mediterráneo.

La Vía Augusta, una de las principales carreteras de origen romano que atraviesan la zona, pasa por varios lugares de espectacular belleza, como el arco de Roda de Berà y la Torre de los Escipiones. También te recomendamos visitar Els Munts, en Altafulla, una villa romana de siglos de antigüedad muy bien conservada. Forma parte de la histórica Tarraco romana, un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Reus es una ciudad de la región de la Costa Daurada conocida, sobre todo, por ser el hogar de Antoni Gaudí, uno de los grandes maestros del modernismo catalán. Curiosamente, no hay demasiados ejemplos de su arte en Reus, pero la ciudad cuenta con numerosos edificios que sí dan buena muestra de este estilo catalán y que puedes visitar, como Casa Navas, Casa Gasull y Xalet Serra.

El diseño del modernismo catalán se basa en la idea de Gaudí de que, para alcanzar la originalidad, era necesario volver a las raíces. Dicho más sencillamente: el movimiento en general incorpora numerosas influencias naturales en sus obras. Esta es la razón por la cual las características paisajísticas de Reus influyen mucho en el arte de la región y se reflejan en la piedra y el ladrillo que dan forma a la ciudad.

Si viajas en familia y queréis disfrutar del mar y las montañas, la Costa Daurada cuenta con bastantes zonas en las que podréis hacer ambas cosas. Tanto el valle de Llors como L’Hospitalet de l’Infant combinan las dos geomorfologías en una ubicación singular. La cueva del Llop Marí es especialmente popular, ya que te permite explorar una pequeña gruta agraciada con una belleza natural espectacular y relajante. Se accede a ella en barco, aunque, si te ves con fuerzas y ganas, también puedes hacerlo nadando.

De hecho, darse un baño en las aguas de esta región te permitirá disfrutar de su rica vida marina. Uno de los peces más abundantes aquí es el atún, una especie que protagoniza buena parte de los platos de la gastronomía local. Si te apetece, puedes visitar este tramo de costa entre mayo y junio y asistir a las Jornadas Gastronómicas del Atún, durante las cuales podrás degustar 1001 exquisiteces únicas para descubrir todos los matices de este manjar mediterráneo.

“Ora et labora” es un dicho popular que ensalza las cualidades de la oración y el trabajo, y forma parte de la regla benedictina en la tradición monástica católica. En la Costa Daurada podrás visitar una espectacular colección de monasterios e iglesias con un diseño extraordinario y elementos que son una auténtica proeza arquitectónica.

La Ruta del Cister te permite recorrer inmensas construcciones eclesiásticas que son joyas sobresalientes de las tradiciones románica y gótica. A los pies de las montañas de Prades se encuentra, por ejemplo, el Real Monasterio de Santa María de Poblet, un lugar protegido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. También acoge las tumbas de algunos monarcas catalanes. Y, si te apetece disfrutar de actividades al aire libre, justo al lado tienes el bosque de Poblet, una amplia reserva natural.

La región del Priorat, que rodea la Costa Daurada es famosa por su tradición vinícola de mil años de antigüedad. Una de las principales bodegas aún en activo de la localidad de Falset abrió sus puertas hace más de cien años. También podrás ver la belleza de los diseños modernistas de Cèsar Martinell en los edificios de las instalaciones e incluso en la distribución de los viñedos.

El vino del Priorat es famoso por su exquisitez, y es que la riqueza del terreno natural ofrece más denominaciones de origen que otras zonas del planeta. Aquí podrás probar también otras delicias de elaboración local, como el vermú, el vino dulce e incluso aceites. No importa el caldo que elijas, todos ellos provienen de las variedades de uva garnacha y cariñena.

Aquí tienes algunas sugerencias para organizar el viaje perfecto a la Costa Daurada.