5 hoteles para disfrutar del verano en familia

La arquitectura colonial y la decoración y detalles inspirados en la cultura canaria hacen que el Resort Gran Bahía del Duque se asemeje a un pueblecito. Gracias a la playa, los jardines, las piscinas y las actividades, este hotel es un paraíso para los niños. Los más pequeños se lo pasarán en grande en el Duqui Club, un espacio en el harán nuevos amigos, representarán obras de teatro, dibujarán o se pintarán la cara con un maquillaje de fantasía, y en el que por las noches podrán bailar con la Minidisco. Mientras los niños se divierten, los más mayores pueden practicar su deporte favorito, realizar una excursión en yate o relajarse haciendo yoga. Cuando cae la noche, el mejor plan en familia es poder descubrir el universo desde el telescopio del Observatorio.

El Hotel Príncipe Felipe se sitúa dentro del complejo La Manga Club, un resort de lujo rodeado de campos de golf en la costa murciana. En él, toda la familia puede jugar o realizar un curso para iniciarse en este deporte, así como en tenis o equitación, y los niños podrán inscribirse en el Campamento de Fútbol del Real Madrid para conocer los secretos de los mejores futbolistas. Los más pequeños tienen muchas opciones para divertirse, y además de realizar deporte, pueden participar en competiciones de Wii, billar o juegos acuáticos, así como en talleres de plastilina o globoflexia. El complejo cuenta con 15 bares y restaurantes, en los que compartir una agradable comida todos juntos y disfrutar de diferentes cocinas del mundo, desde la italiana hasta la asiática.

El Resort Viva Cala Mesquida se encuentra en primera línea de la playa de Cala Mesquida, rodeado por un tranquilo entorno en la isla de Mallorca. Sus habitaciones son apartamentos con sala de estar, cocina y terraza, pensados para que toda la familia se sienta como en casa. Los niños estarán bien entretenidos en el barco pirata de la piscina infantil y con todas las actividades que el resort les ofrece. Cada día es temático y los más pequeños podrán jugar con la mascota Bufo, convertirse en artistas de circo, deportistas olímpicos o magos, e incluso uno de los días está orientado a divertirse en familia, en el que los padres también pueden participar. El spa y los deportes como el minigolf, el tenis o la natación completan la oferta de ocio de este hotel en el que es imposible aburrirse.

Con unas vistas inigualables sobre las montañas y el Valle de Arán, el Parador de Vielha es el enclave perfecto para los excursionistas. Además de poder realizar senderismo y visitar el casco histórico de Vielha, con sus típicas casas solariegas, este verano, el Parador regala a sus huéspedes una excursión guiada por el Valle, toda una experiencia para vivir la naturaleza y la historia de la zona. El hotel cuenta con un parque infantil y una zona de juegos para que los niños se diviertan, así como una piscina en la que darse un baño rodeados de un entorno espectacular. En su restaurante cuentan con varios menús para niños, además de juegos con los que aprenderán a comer de una forma saludable conociendo las bases de la cocina mediterránea.

Situado en primera línea de la playa de Playamar en Torremolinos, el hotel Sol Príncipe destaca por sus piscinas. Cuentan con una gran piscina lago caribeña de más de 1500 metros cuadrados, dos piscinas infantiles y zonas de hidromasaje, amenizadas con música ambiente durante el día. Todas las habitaciones cuentan con fantásticas vistas, o bien a la playa o bien a la piscina, y algunas de ellas son familiares, muy amplias y con cocina incluida. Los más pequeños estarán encantados de pasar aquí sus vacaciones gracias a su zona temática dedicada a Los Picapiedra. En ella, podrán fotografiarse con los personajes de la serie de dibujos animados, montar en tirolina y camas elásticas o aprender sus primeras recetas de cocina.