5 hoteles en Menorca para niños ¡y para vosotros!

Si queréis alojaros en la capital, pero sin estar en pleno meollo y con vistas permanentes al mar, el Hotel Port Mahón es perfecto: está ubicado en una zona residencial a tan solo 10 minutos del centro de la ciudad y mirando al puerto.

Arquitectónicamente, es un edificio distinguido y singular de estilo colonial. Todo el establecimiento emana luminosidad y buen gusto, con una decoración relajante y nada cargada. Cuenta con una estupenda piscina ajardinada y un restaurante buffet y un bar con terrazas que son verdaderos miradores al Mediterráneo. A la sombra de las pérgolas podréis disfrutar de la sabrosa gastronomía tradicional menorquina o comer algo más ligero e informal.

Seguimos en Mahón para daros otra muy buena opción de alojamiento en la capital: el Hotel Artiem Carlos. De hecho, este establecimiento está ubicado justo en la boca del puerto de Mahón, en el municipio de Es Castell; un emblemático pueblo con una interesante historia y mucho que ver, además de la salida del sol (es la primera localidad de toda España en ver amanecer gracias a su situación geográfica).

Las vistas desde el Artiem son sencillamente extraordinarias, como su piscina infinity, el spa, la terraza de su excelente restaurante, el gimnasio con vistas al puerto, las clases de yoga, la atención del personal, las habitaciones y la cocina, incluyendo el desayuno buffet. Es realmente un gran hotel.

El único inconveniente es que, de los 5 hoteles en Menorca para niños de esta selección, este es el único al que solo podréis ir en familia si vuestros hijos ya han cumplido los 16 años, ya que es un adults only.

Cala Galdana es una playa cerrada, y protegida del oleaje por acantilados, que está situada a media hora de Mahón y de Ciutadella. Aquí dispondréis de todos los servicios y comodidades que podáis necesitar sin renunciar a la belleza natural que todavía conserva la cala: buceo, alquiler de hamacas, sombrillas, kayaks y barcos a motor, farmacia, supermercados, etc. En este enclave es donde se encuentra el Ilunion Menorca: un conjunto de apartamentos recién reformados y muy bien equipados, con terraza y vistas a la piscina del complejo (construida pensando también en los niños).

El régimen de alojamiento es de media pensión y hay restaurantes para todos los paladares y para diferentes situaciones: desde las diversas zonas del buffet al bar-restaurante junto a la piscina.

Si buscáis un alojamiento que os haga sentir como en casa y con muchos servicios, de estos 5 hoteles en Menorca para niños, el Ilunion es uno de los más indicados. El complejo es un espacio familiar, pero apacible, y la amabilidad del personal os facilitará mucho la vida.

El complejo de aparthoteles Tramontana Park es una opción similar a la anterior, pero para los que queréis tener el campamento base en Fornells porque habéis oído hablar maravillas de este encantador pueblo de pescadores con siglos de historia ¡y de su exquisita caldereta de langosta!

Fornells abriga calas y parajes asombrosos, como los que disfrutaréis si os alojáis en esta mini urbanización que parece un pequeño pueblo menorquín. El Aparthotel está ubicado en primera línea de costa, rodeado de naturaleza, con acceso directo al mar y múltiples espacios y servicios pensados para que los niños se lo pasen en grande: piscina, zona de juegos, ping-pong, actuaciones, etc.

El complejo también cuenta con gimnasio, un restaurante buffet en el que podéis desayunar, comer y cenar, y una terraza (la del bar) con vistas impagables sobre el mar.

Muchos turistas van de vacaciones a las Baleares por sus playas, ¡sin saber lo que se están perdiendo al no visitar su interior! La Menorca rural es uno de los secretos mejor guardados de la isla y el pueblo de Ferrerías es uno de sus tesoros.

Aquí tendréis playas de ensueño a tan solo unos minutos, pero en un entorno natural mágico de colinas, barrancos (el de Algendar es el más grande de Menorca), exuberante vegetación y extensos bosques totalmente vírgenes. El pueblo data del siglo XIII, es conocido por sus quesos y embutidos artesanales, por su repostería, por cómo trabajan el esparto, el vidrio, el macramé y el cuero (id al mercado que se celebra los sábados), son los grandes maestros de las abarcas (el famoso calzado local con versiones tradicionales y de diseño renovado) y sus fiestas populares tienen un atractivo especial.

Si decidís ir a Ferrerías, alojaros en el Hotel Ses Sucreres. Este establecimiento es una antigua casa señorial de tan solo seis habitaciones que fue restaurada hace unos años con mucho mimo y buen gusto. Os darán un trato cercano y disfrutaréis del lujo de lo auténtico: un desayuno casero en su bonito patio encalado, cómodos colchones, jabones y champú ecológicos, mermeladas preparadas por ellos, pan del pueblo elaborado como antaño…